Navegando por aquí y por ahí encontré un vídeo que me sorprendió de sobremanera. En seis minutos un individuo con una guitarra y una marioneta es capaz de arrancar una sonrisa con un trabajo bien hecho. Posiblemente lo que más me guste es que demuestra que no necesitamos demasiados artilugios para hacer algo bueno. Al fin y al cabo el talento es lo que importa y lo que se busca. Espectacular.



[Vídeo de rizoto 1000]